Todos soñamos ser artistas Por Paulo Inostroza, periodista El cantante más escuchado el 2023 en Chile fue Jere Klein, y por paliza. Sí, probablemente los adultos no tengan idea quién es y se pregunten: “¿No era Marcianeke el más popular del grupo?”. Bue-no, los jóvenes cambian de referente con una rapidez propia de la épo-ca. Los que ayer eran tendencia desaparecen, la gente está ávida de una cara nueva y cada emergente personaje acepta ser estrujado el mayor tiempo posible. Hasta que duren el juego, la fama y el dinero. Jeremías Tobar tiene 17 años y metió siete temas en el top 50 del país, según datos de Spotify. Brutal. No canta nada bien y reconoce que nunca lo ha hecho. No rima mejor, pero sabe que a nadie le interesa de-masiado. A ratos, hay que ponerle subtítulos para entender qué quiere decir, pero, así y todo, es el artista más popular del momento. Apenas tiene un álbum, recién va a llenar su primer Movistar. Este fenómeno juvenil no es casual. Todos pueden ser Jere Klein, no necesitan más que “la perso”, el arrojo y, tal vez, algo de carisma. Y ape-lar a todos los clichés del rubro que a la juventud atrae sobremanera: el lujo, el videoclip con dos Lamborghini, el jockey rojo de Lacoste, los collares gigantes de oro. “Ya no me enamoro, mi único amor es la plata”, canta mientras cuenta billetes en la rueda del auto. Standly se llama Camilo Paredes, viene de San Felipe y tiene 21 años. Fue el boom del 2022 y hoy ya no tanto. Carlos Rain es de Talca, se hace llamar Pailita, tiene 23 años y arrasó el 2022 con ‘Ultra solo’. Todos muy cabritos. El talquino Marcianeke (Matías Muñoz) recién tiene 21 y el Jor-dan acaba de cumplir 23. De Lo Prado, igual que el Jere. >Cultural