Casos sobre salud mental que salieron a la luz luego de la noticia de Simone Biles: Michael Phelps, luego de colgarse 23 medallas de oro, en 2012 entró en un proceso depresivo que sigue latente, pero bajo acompañamiento. Naomi Osaka, actual número 2 del ranking ATP femenino, vivió una profunda depresión al finalizar los Juegos Olímpicos de Londres. Esta situación la llevó a reflexionar sobre la importancia del entrenamiento mental, más allá del físico, técnico o estratégico. Raven Saunders, lanzadora de bala, fue quinta en los Juegos Olímpicos en Río 2016. Tras volver de la competencia, cayó en una fuerte depresión, sentía que nadie podía ponerse en su lugar. Antes de llegar a Tokio, quiso desestigmatizar la salud mental, haciéndose ayudar para controlar el estrés y la ansiedad.